la casa es super bonita y acogedora, nos sentimos genial desde el primer momento. los desayunos eran un manjar, todo fresco y riquísimo. los dueños son majos y siempre dispuestos a ayudar. el jardín y el rooftop son perfectos para relajarse. el lugar es muy tranquilo, ideal pa desconectar.

la cama podría ser un pelín más cómoda y el aire acondicionado habría estado bien.

La casa es una joya, decorada con mucho gusto y con una atmósfera acogedora que te hace sentir como en casa. Cada mañana, el desayuno es un festín, con ingredientes frescos y atención en cada detalle. La ubicación es fantástica, en el centro de la isla, permitiendo acceder fácilmente a las playas y explorar diferentes lugares sin complicaciones. La tranquilidad del entorno es un plus que asegura un descanso reparador.

Aunque la cama era cómoda, un aire acondicionado habría mejorado la experiencia en días calurosos.

Disfrutamos de una estancia muy placentera. La casa está decorada con mucho gusto y se siente muy acogedora. Los desayunos son exquisitos, con mucha atención a los detalles. La tranquilidad del lugar permitió que descansáramos plenamente. Además, está en el centro de la isla, lo que facilita explorar distintas playas y calas.

La decoración es impresionante, con toques auténticos que hacen que el lugar se sienta muy acogedor. La cama era cómoda, pero el baño podría mejorar un poco en cuanto a privacidad al estar separado solo por una puerta corredera de cristal. El desayuno está bien, aunque me habría gustado más variedad, el pan de masa madre que ofrecen es delicioso. La tranquilidad del entorno es ideal para relajarse después de explorar la zona.

Desayunos que son un festín

Despertar con el aroma de un desayuno casero es mágico. La atención de los dueños y la decoración bien mallorquina crean un ambiente perfecto y acogedor para relajarse después de explorar la isla.

Aunque la cama era cómoda, un aire acondicionado habría mejorado la experiencia, especialmente en días calurosos.

Un buen lugar para una breve pausa en Llubí con un precio razonable. La atención fue excelente, nos dejaron sombrilla y neverita para la playa. No olvides probar el desayuno, tienen detalles diferentes cada día.

El lugar es ideal para familias, con un ambiente tranquilo que nos permitió disfrutar del descanso. La propietaria es muy amable, y además nos recomendó actividades como el senderismo en las montañas cercanas, que fue un éxito con los niños y el bebé.

A mis hijos les hubiera gustado más variedad en el desayuno, como ensaimadas típicas de la zona.

Un lugar muy acogedor

Estuvimos 7 noches y la verdad es que todo fue genial. La atención de los dueños fue de 10, siempre atentos a lo que necesitábamos. El desayuno era variado y riquísimo. Un detalle que nos encantó fue que ofrecían sombrillas y bebidas frías para llevar a la playa. La única cosa que mejoraríamos sería la comodidad de la cama, porque a veces se hacía un poco dura.

Encantador alojamiento, ideal si buscas un escape romántico con un desayuno abundante disponible en un tranquilo patio al aire libre.

La casa tiene un estilo mallorquín encantador y te sientes como en casa. El lugar es muy tranquilo y perfecto para desconectar, con una hermosa terraza. hay Wi-Fi gratis, ¡lo cual siempre es un plus!

La cama era un poco incómoda, podría ser mejor. ¡una buena cama es esencial, como un buen vino!

escapada ideal para explorar mallorca y disfrutar de la tranquilidad

Nos hospedamos durante 4 días en este encantador hotel donde el desayuno era completo y casero, además de contar con una habitación cómoda con aire acondicionado que ayudó a sobrellevar el calor de Mallorca. me encantó que la iglesia Santa Maria de Sineu, a menos de 7 kilómetros, te permite disfrutar de una mañana cultural a pie.

Los dueños son encantadores, la decoración de la casa es preciosa y muy mallorquina. Disfruté de los desayunos que preparan con mucho cariño y atención a los detalles. El lugar es tranquilo y se duerme muy bien, ideal para descansar después de un día explorando la isla. Además, aunque está en el centro, necesitas coche para llegar a las playas.

Cama incómoda

El lugar es super bonito, decorado con estilo mallorquín , perfecto para desconectar. Los desayunos son un manjar, frescos y muy bien preparados. Además, la tranquil lidad fue ideal para descansar y recargar energías.

No pude encontrar ni un fallo.